
Miren esos ojitos... lo dicen todo. Una ternura imposible de explicar con palabras... Esta negrita dulce pasó varios días en el canil municipal pero finalmente encontró una familia que quiso adoptarla y rehabilitarla del maltrato y el sufrimiento que había vivido en la calle. Sus primeros días en el nuevo hogar no fueron fáciles pero nos dieron la pauta de que la adoptaron con mucha responsabilidad y compromiso. Gracias!! en nombre de esos ojitos de la foto.